"Un sueño de su infancia, que dividió entre la ciudad de Las Piedras y el barrio Peñarol en Montevideo"
Desde este año, Stephanie Techera es piloto de combate, se convirtió así en una de las tres que tiene la Fuerza Aérea Uruguaya. Además, es la segunda en volar un A-58 Pucará. Para la teniente Stephanie todo comenzó como un sueño de su infancia, que dividió entre la ciudad de Las Piedras y el barrio Peñarol en Montevideo, que ella misma, con esfuerzo, fue transformando en realidad al concretar su ingreso en la Escuela Militar de Aeronáutica, donde cumplió su primera meta de ser piloto. Su formación profesional continuó luego en la base aérea de Durazno, donde en 2012 se transformó en piloto del sistema A-58 Pucará -tiene cuatro ametralladoras, dos cañones de 20 milímetros y tres estaciones en las que puede llevar suspendida una gran variedad de bombas y cohetes- y desde el 15 de enero pasado en piloto de combate; es una de las tres de la Fuerza Aérea Uruguaya y la segunda en esta aeronave en la historia de la institución.
PRUEBA. La mañana del 15 de enero se presentó con las condiciones meteorológicas óptimas para surcar los cielos y es que se dispuso el desarrollo de la inspección, la cual Stephanie cumplió en forma destacada según el piloto de experiencia que tuvo a cargo esa instancia. Desde ese momento llegaba la instancia tan esperada, la de volar sola, con cargas de munición real para su lanzamiento en el polígono de tiro de La Carolina, ubicado en la zona de Rincón del Bonete. Hacia allí partió tripulando el FAU 222, mientras como jefe de sección, su instructor y comandante del escuadrón aéreo número 1 el mayor aviador Juan Pereyra, junto al capitán aviador Wilfredo Guedes lo hicieron en el FAU 227 en carácter de jefe de sección, partiendo rumbo al objetivo sobre la hora 14. Stephanie cumplió en forma satisfactoria la misión poniendo en práctica, esta vez sola con su avión, todo lo aprendido durante el período de la instrucción. Una vez que retornó a Durazno la estaban aguardando, no solamente sus compañeros del escuadrón aéreo de ataque, sino los demás oficiales de la Brigada que se encontraban en actividad a los efectos de darle la bienvenida a ese grupo selecto de pilotos de combate y más en su caso en su condición de mujer. Stephanie dijo que "emocionada es poco decir cómo me siento y principalmente muy agradecida con el comandante del escuadrón que fue mi instructor durante todo este largo curso, quien me inculcó todos los conocimientos profesionales del avión, transmitiéndome todas sus experiencias que muchas veces son mucho más ricas que lo que dicen los propios manuales, porque es lo que una realmente vive en el cielo. Tuve el honor de haber tirado las dos bombas reales y haber pegado en la isla, así que contenta es poco decir", expresó. Un momento muy emotivo fue el regreso con la satisfacción del deber cumplido y luego del pasaje bajo por las instalaciones de la base, el aterrizaje y chequeo de la aeronave, la estaban esperando los oficiales de la unidad encabezados por el coronel aviador José Visconti para saludarla ante tan importante acontecimiento para la fuerza del aire, como para la carrera profesional de Techera. "Me sorprendió la tranquilidad que tenía, consistió en un vuelo más donde había que realizar cosas que ya habíamos hecho y posteriormente lo que sentí fue mucha emoción por estar junto a mis camaradas y la gente que me ha apoyado todo el año", afirmó la nueva piloto de combate uruguaya. Fuente: Diario El País
1 comentario
Martha -